Existe una figura que puede ayudar al emprendedor a desarrollar sus ideas y transformarlas en negocio. Personas físicas con un amplio conocimiento en determinados sectores, con capacidad de inversión y capaces de impulsar esos negocios en sus primeras etapas de vida. Es el Business Angel. ¿Quieres conocerlo mejor?
El Business Angel es una persona, de carne y hueso, que posee un amplio conocimiento de determinados sectores. Y lo que más te importa: posee capacidad de inversión y está capacitado para desarrollar proyectos empresariales con alto potencial de crecimiento en sus primeras etapas de vida, aportando capital y valor añadido a la gestión. Por eso es una figura radicalmente distinta al tradicional inversor: el Business Angel se implica en la gestión de la empresa, aunque no se involucra en su día a día; aporta valor añadido.
Sus funciones son claras:
• Invierte su propio dinero, en la etapa inicial de la empresa y sólo en zonas próximas a su lugar de residencia.
• Sus decisiones de inversión pueden ser distintas a las motivaciones estrictamente financieras (satisfacción profesional, vinculación familiar, etc.).
• Los importes invertidos son muy inferiores a la media que dedican a las entidades de capital riesgo en cada operación. Y, análogamente, la desinversión suele ser más lenta que en el caso de los inversores de capital riesgo.
• La rentabilidad es generalmente inferior a la obtenida por las entidades de riesgo.
Existen distintas entidades que pueden analizar tu proyecto de manera profesional, así como la Red Española de Business Angels. No dudes en acudir a ellas para conocer de qué manera puedes hacer realidad esa idea que tienes en la cabeza.
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