¿Es viable la reducción de la cuota a autónomos con bajos ingresos?

Una de las obligaciones fiscales de los trabajadores autónomos es el pago mensual de la contribución que realizan a su base de cotización, además de adelantar el IVA o el pago de los servicios de su gestoría para estar al día con Hacienda. Cuando estos costes se disparan, el autónomo decide no darse de alta. ¿Cómo se podría solventar esta situación? Una alternativa es la reducción de cuota para aquellos autónomos con bajos ingresos.

El autónomo que decide constituirse como tal debe afrontar una serie de gastos previos que, en la mayoría de los casos, frenan su impulso inicial: pagos de IVA por adelantado, de los servicios de su gestor o la mensualidad de su cotización sin saber si posteriormente percibirá o no ingresos al inicio de su actividad. En los últimos tiempos se está difundiendo por blogs y redes sociales una interesante propuesta: ser autónomo por 50 euros. Según esta iniciativa, esta tipología podría darse de alta aunque tuviera unos ingresos bajos, como es el caso de menos de 600 euros al año. De esta manera, este autónomo perdería los derechos a amortizar gastos en sus declaraciones, pero podría trabajar legamente declarando sus ganancias, por mínimas que sean, al Estado.

Si bien pudiera parecer que esta medida no pasa de ser una propuesta utópica, en otros países, como Reino Unido, los costes de los trabajadores autónomos son mucho más económicos, redundando así en mejores garantías para los ciudadanos. Y más en tiempos de crisis. Y aunque la medida aún no se ha propuesto de manera definitiva ni se ha dado a conocer a los organismos pertinentes, propiciaría la declaración de muchos trabajos que todavía se ejecutan bajo la sombra de la economía sumergida.